Hoy en día, Reiki, es el sistema de terapia complementaria energética más conocida o extendida. Sin embargo, hay muchos otros basados en el mismo fundamento y con características similares (Energia universal, Diksha, … etc)
¿En qué consiste una sesión de reiki o una imposición de manos?
Una sesión de Reiki consiste básicamente en una relajación profunda. En la que el practicante de Reiki, va poniendo sus manos sobre los distintos chakras y zonas a tratar del cliente. Desde la cabeza hasta los pies, lugar de finalización o “postura de descarga”. Canalizando energía de fuerza vital universal hacia la persona.
Se ponen las manos principalmente sobre la cabeza para tocar el chacra 7 o corona y en diferentes puntos (oídos, sienes, etc.); Sobre los ojos para tocar el chacra del Tercer Ojo; sobre la garganta, corazón, estómago, abdomen e inglés, para mandar energía al chacra 1º o raíz. Es decir, se recorren cada uno de nuestros siete principales centros energéticos simultáneamente. Siempre en función de las necesidades del paciente. Se pueden ir empleando diversas posturas encaminadas a tratar una zona o una dolencia concreta.
- El paciente no necesita más que estar vestido lo más cómodo posible. Puede tumbarse en una camilla o permanecer sentado. Muchas personas se quedan dormidas a lo largo del proceso.
- La duración de una sesión completa puede variar de una hora a hora y media. En función de las necesidades del paciente. El tiempo “adecuado” para imponer las manos en cada posición es algo que puede variar, dependiendo del practicante, del paciente y de la afección. Hay maestros de Reiki que recomiendan un mínimo de 3 minutos por cada posición, yo me guio por mis manos. Se recomienda seguir la temperatura de las manos. Cuando dejan de estar calientes es porque la energía ha dejado de fluir y, aunque en algunos casos no se ponen calientes, se trata de distinguir las variaciones que se pueden percibir.
- Para un tratamiento completo de Reiki se recomienda recibir de 4 a 5 (un total de 5 es lo mejor) sesiones consecutivas, o al menos, en semanas consecutivas, si por tiempo y otras circunstancias no es posible hacerlo de manera continua. Es la forma de comenzar, pues la energía Reiki necesita un tiempo de activación y asentamiento. Posteriormente la necesidad de volver a recibir Reiki variará según la persona y aquello que necesite sanar. Hay pacientes que no lo vuelven a requerir, otros mensualmente, cada 15 días, o con más frecuencia dependiendo de sus dolencias. También se puede trabajar diferentes partes o zonas durante más tiempo , en intervalos de días dependiendo del caso y como de 10 a 20 minutos, o 30 minutos en sesiones localizadas, según el problema y el grado de este a tratar .
En otras entradas hablaremos con más detalle de cada uno de los chacras, cómo funcionan y la acción que tiene la energía sobre ellos, así como su equilibrado y armonización sobre nuestro yo mental/emocional. Reiki es una terapia completamente natural y nada invasiva en la que tanto paciente como practicante son beneficiados. El practicante canaliza la Energía Universal que fluye a través de sus manos al cuerpo del paciente, esta trasferencia representa una curación para ambos, el que lo recibe y el que lo trasmite. Solamente la energía requerida puede ser recibida, el receptor nunca puede “sobrepasarse” porque la energía, nuestro cuerpo, tiene su propia inteligencia. Solo absorbemos la energía que necesitamos.
La terapia de Reiki es la única terapia alternativa reconocida oficialmente por la OMS (Organización Mundial de la Salud) como terapia efectiva y de resultados comprobados.
Sensaciones que se pueden experimentar en una sesión de Reiki o de terapia energética
Las sensaciones pueden variar en función del la persona y del practicante, generalmente
- Normalmente se experimenta una sensación de calor en la zona donde están puestas las manos, y algunas veces de frío. Lo cual para algunos refleja la densidad de la energía, bloqueos o desequilibrios.
- Frescor o frío (canalización de la energía), ven colores…
- Suave vibración, algunas personas hablan de golpes de corriente.
- Algunas veces el receptor puede no experimentar físicamente nada y puede pensar que Reiki no está trabajando.
Sin embargo, la energía de Reiki trabaja en un nivel muy sutil. Puede a menudo tener resultados profundos, que llegan a ser evidentes en los días o las semanas siguientes. La energía actuará donde más se necesite y trabajará en todos los niveles – físico, mental/emocional y espiritual.
Cada ser humano percibe la energía Reiki de distinta manera. Hay que mantenerse al tanto de las sensaciones de energía que se puedan sentir. Pueden ser muy sutiles pero con la práctica descubres que son innegables.
En mi opinión, es muy recomendable combinar Reiki con otras técnicas. Psicoterapia, o terapia cognitiva, dónde el paciente vea y comprenda sus mecanismos mentales, sus procesos emocionales. Cómo actúa nuestro sistema de creencias, nuestros patrones.
Las técnicas para la reducción del estrés nos ayudan a enfrentarnos a las situaciones que nos resultan difíciles sin toda esa carga y esa ansiedad que esos patrones inconscientemente generan. Aprendemos a analizar nuestra situación personal de una forma más clara y objetiva.
Conseguir resolver nuestros problemas refuerza nuestra autoestima y nuestra seguridad.
Jenia Dávila
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